Jay sólo quería que lo dejaran en paz. Cuando escapó de su
antiguo compañero, pensó que lo había conseguido.
Hasta que uno de los secuaces de Ian lo sorprendió
comprando en la ciudad e intentó agredirlo.
Para su sorpresa, otro dragón interviene en su rescate,
algo que nunca pensó que haría ningún dragón. No para un humano usado como él,
pero Víctor lo hizo. Es guapo y amable y Jay no puede evitar estar interesado
Víctor nunca se perdonó la muerte de su madre. Ella también
era una humana, y ver que los humanos son maltratados y atacados le impulsa a
actuar.
Sin embargo, hay algo en este humano, algo que Víctor no
puede ignorar. Jay es especial, y Víctor no puede mantenerse alejado.
Apenas conoce al humano, pero lo desea, quiere darle a Jay
su mordisco y reclamarlo como propio, aunque tenga que luchar contra el antiguo
compañero de Jay para hacerlo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario