Blair Callaghan odia a los vampiros, odia a los hombres
lobo y definitivamente no confía en los dragones.
Pero hay un dragón que a Blair no le molesta demasiado.
Cuando su padre regresa después de días desaparecido, un
vampiro, Blair sabe que no tiene otra opción. Debe confiar en uno de los
dragones que desprecia. Uno de los dragones que lo ha estado mirando con un ojo
interesado últimamente.
Cuando Vanko es llamado por su compañero a deshoras, no
puede estar más emocionado. Finalmente. Está a punto de suceder. Su compañero
se está dando cuenta de la verdad y lo quiere.
Pero no exactamente. Blair necesita algo, un gran favor.
Para que Vanko no mate a su padre y le brinde la ayuda que necesita.
Vanko tiene la obligación de matar a cualquier vampiro
peligroso con el que se encuentre, y los vampiros recién convertidos no siempre
son los más estables, ¿y quién lo convirtió?
¿Y qué harán con el compañero de Vanko si él no se ocupa de
esto rápidamente?
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