En una misión de rescate en el corazón de
la jungla de Indonesia, el doctor Draden Freeman y su equipo de Caminantes
necesitan sacar a los heridos lo más rápido posible o correr el riesgo de
propagar un virus mortal desatado por una célula terrorista. Cuando Draden se
infecta, obliga a su equipo a dejarlo atrás. No va a correr el riesgo de
exponer a nadie más. Tiene la intención de encontrar a los responsables y salir
glorioso...
La misión de Shylah Cosmos es rastrear el
virus y permanecer sin ser descubierta. Sus mejorados sentidos le dicen que el
magnífico hombre que erradica a los terroristas uno por uno es un Caminante
Fantasma, y su letal precisión le quita el aliento. Cuando él es golpeado por
un golpe de suerte, no puede evitar intervenir, sin saber que al salvarle la
vida se ha expuesto al virus.
No se sabe cuánto tiempo les queda a
Draden y Shylah. Corriendo para encontrar una cura, se dan cuenta rápidamente
de que han encontrado a su pareja perfecta justo a tiempo de perderlo todo.
Pero aunque el virus amenace con consumir sus cuerpos, ninguno de ellos se
había sentido nunca más vivos.
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