Myles pensó que ganar cinco mil dólares rápidamente
resolvería muchos de sus problemas. Había pensado mal. El hombre que le había
pagado para entrar en el apartamento de Austin Girard le puso un contrato en la
cabeza. Peor aún, el vampiro, Zenlo, del que Myles había estado huyendo quería
recuperar su propiedad. Es decir, Myles. Ahora un cambiante de lobo rescató a
Myles de las garras de Zenlo, pero ¿a qué precio?
Cade afirmaba que eran
compañeros, pero Myles había terminado con los hombres y con la confianza en
ellos, especialmente en los de la variedad no humana.
Cade había intentado derribar los muros de Myles desde que
lo rescató de Zenlo. Se dio cuenta de que Myles no lo aceptaba. Su compañero
luchaba contra él en todo momento, hasta que Myles estuvo a punto de ser
secuestrado en la calle. Sus problemas no hacían más que empeorar, pero Cade
estaba decidido a demonstrar a su compañero que eran un equipo. Por desgracia,
Zenlo estaba tan decidido a recuperar a Myles como Cade a mantenerlo a salvo.