Gabriel
Weston nunca quiso encontrar un compañero. Él fue abusado por los alfas antes y
no quiere formar parte de ellos ahora. Desafortunadamente, cuando se escapa de
su antigua manada y se despierta lesionado, descubre que está emparejado con un
lobo alfa muy grande y muy poderoso, uno que tiene una mala reputación.
Brishen no
quiere asustar a su pequeño compañero. El hombre ya ha pasado lo suficiente,
pero también quiere estar cerca de él, necesitando sentir el contacto físico de
su pareja para aliviar su propio dolor y demostrar que no es lo que dicen los
rumores.
Después de
que Gabriel descubre que está embarazado del cachorro de Brishen, los dos
comienzan a dar pequeños pasos hacia la confianza, pero uno de los omegas de la
antigua manada de Gabriel está buscando venganza, y cuando pone a Gabriel en
peligro, Brishen tendrá que correr al lado de su compañero antes de que pierda
todo lo que él aprecia.
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