Hace seis
meses, Kendrick y Jackson Michaels llegaron a la ciudad, de paso, hasta que les
rogué que me ayudaran con un problema. Desde aquel día, se han quedado
trabajando en mi cafetería. Los guapísimos hermanos me ponen cachonda, pero
ignoro mis ansias. ¿Quién se acostaba con sus empleados? Además, ni siquiera
estoy segura de que sean gays.
Entonces
me secuestraron, junto con mi mejor amigo. Nezat, un demonio, me secuestró,
pero fueron Jack y Ken quienes me rescataron. Ahora vivo con el miedo de que
Nezat regrese. Sólo hay una manera de mantenerlo alejado de mí. Sólo que no
estoy segura de que la solución sea algo que pueda llevar a cabo. ¿Yo, quedarme
embarazada y destrozar este cuerpo? No, gracias.
Pero
cuando Jack y Ken me dicen que me desean desde la primera vez que me vieron,
estoy perdida. No hay forma de que pueda resistirme a dos poderosos
cambiaformas oso, aunque eso signifique tener un bollo en el horno.
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