Adam
Macias ha tenido varios problemas en su vida, pero perder su beca de la AV
porque su coche se rompió y se perdió una clase fue la que lo derrotó. Un
familiar vive lejos de su hogar y el cogerá el autobús hasta Sacramento, donde
su primo le ha ofrecido un trabajo, una casa y un nuevo comienzo. Él tiene un objetivo,
y ese es recuperar su vida. ¿Amigos, mascotas y amantes? No es necesario.
Finn
Stewart echa un vistazo a Adán mientras él está solicitando empleo en el Candy
Heaven y decide que es demasiado fascinante para dejarlo solo. Finn es
brillante y resplandeciente, y nunca le han herido. Adam es cauteloso por su
atención desde el principio. Finn es peligroso para la paz que Adán se está
forjando y Adán puede estar demasiado dañado como para dejarlo entrar en su
vida.
Pero Finn
es tenaz, y el nuevo jefe de Adam, Darrin, no acepta un no por respuesta. Adam
va a tener que preguntarse a sí mismo qué es más difícil: ¿dejar entrar a Finn
o vivir sin él? Con las fiestas acercándose parece una pregunta fácil, pero
Adán sabe por experiencia que la vida raramente es simple, y el mundo raramente
coopera con esperanza, fe, o planes de gatos y de hombres.
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