Sola Morte, una vez ladrona, ha
abandonado su antigua vida y dejado el lado equivocado de la ley. Huyendo de la
familia de un narcotraficante, se encuentra muy lejos de Caldwell con su amada
abuela a salvo. Sin embargo, su corazón está en el norte, con el único hombre
que ha derribado sus defensas: Assail, hijo de Assail, que nunca quiso
enamorarse, y desde luego no de una mujer humana. Pero no tienen futuro, y no
solo porque ella no sepa que él es un vampiro, sino porque Assail no va a dejar
de facilitar armas a la Hermandad de la Daga Negra. Pero el destino tiene otros
planes para ellos. Cuando Assail cae en coma y permanece al borde de la muerte,
sus primos buscan a Sola y le ruegan que le dé una razón por la que vivir. Lo
último que quiere es volver a su pasado, pero, ¿cómo podría dejarlo morir?
Cuando un nuevo y letal enemigo de los
vampiros muestre su cara y la Hermandad necesite que Assail vuelva a su ser,
Sola se encontrará a sí misma no solo siendo un objetivo, sino como una fuerza
fundamental en una guerra que no entiende. Y cuando salga a la luz la verdad de
Assail, ¿huirá del horror... o seguirá a su corazón y caerá en los brazos del
hombre que la ama más que a la vida misma?
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