Érase una
vez un anciano rico que adoraba, apreciaba y amaba profundamente a un shifter
lince. Cuando cambiaba, el lince pasó muchas horas acostado sobre una almohada
a los pies del hombre mientras aumentaba su ya enorme fortuna.
Mientras
estaban en su forma humana, el shifter y el anciano rico disfrutaron
descubriendo escondites románticos alrededor del mundo, cenas largas a la luz
de las velas y horas de intensas uniones de sus corazones, mentes y cuerpos. Un
día, el shifter decidió tomar su forma de lince y merodear la vasta propiedad
del anciano. Ese día, el lince nunca regresó.
El anciano
no escatimó gastos en la búsqueda de su lince. Creó un equipo de ex soldados de
élite, agentes del orden y agentes del gobierno que tenían la tarea de salvar a
tantos de estos shifters capturados como fuera posible, con la esperanza de
encontrar a su lince.
Estas son
sus historias.
Hola, buenas tardes.
ResponderEliminarMuchísimas gracias por compartir este regalo.
Un abrazo ❤️