Se llamaba
Bug. Supuse que era porque estaba más loco que una chinche hasta que me salvó
cuando fui atacado. Por razones que solo él conoce, Bug pensó que era su deber
mantenerme a salvo. Yo era el Sargento de Armas de los Soldiers of Fortune MC.
No necesitaba ser salvado, pero no podía decirle eso, especialmente no después
de descubrir que era mi compañero.
Se llamaba
Bear. Encaja. Era alto y aterrador, y construido como un oso. También fue mi
salvador, incluso si no lo sabía. Cuando vi a alguien atacarlo en un callejón
una noche, supe que tenía que salvarlo. Cuando todos ignoraron mi preocupación
por su seguridad, supe que era el único que podía salvarlo. Pero, cuando
comenzó a hablar sobre compañeros y shifters osos, tuve que preguntarme si
estaba más loco que yo.
Cuando
surgen problemas para los Soldiers of Fortune MC, convencer a Bear y a sus
hermanos del club para que escuchen los susurros que escucho en las sombras
puede ser más difícil que aceptar el hecho de que los shifters son reales y
estoy emparejado con uno de ellos.
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